Día de Luto para San Andrés del Rabanedo, hoy, que la locomotora Mikado será el último tren que atra vesará el Crucero, abandonando el sueño del Museo Ferroviario en San Andrés del Rabanedo.

DÍA DE LUTO PARA SAN ANDRÉS, hoy, que la locomotora Mikado será el último tren que atravesará el Crucero, abandonando el sueño del Museo Ferroviario en San Andrés del Rabanedo. Izquierda Unida lamenta perder la posibilidad de este espacio cultural y de patrimonio histórico en los terrenos de nuestro Ayuntamiento.

Desde IU denunciamos la escasa o nula capacidad de gestión del actual equipo de gobierno municipal para negociar con el gobierno central y la Junta de Castilla y León y conseguir que el futuro Museo Ferroviario quedara en terrenos del Ayuntamiento de San Andrés. Un Museo que sería fuente de enriquecimiento cultural y patrimonial para la ciudadanía, nicho laboral de puestos de trabajo cualificados para nuestra juventud, y germen de dinamismo turístico de nuestro municipio, tan escasamente dotado en materia patrimonial, artístico, cultural y turístico.

Es una auténtica lástima que la mítica máquina de vapor Mikado, que hoy será el último tren que atravesará el Crucero, la máquina eléctrica ‘la inglesa’, vagones de la serie 6000, campanas, lámparas, manómetros…, custodiados por la Asociación Leonesa Amigos del Ferrocarril, no se hayan convertido en uno de los espacios emblemáticos y de identificación cultural de nuestro Municipio, ubicándose en las dependencias de material, motor de San Andrés del Rabanedo, donde está ubicado el almacén de máquinas.

Los talleres de material motor de San Andrés los hizo Renfe en los 50 y es una arquitectura industrial de cemento y cristal única. Tres departamentos de la Universidad de León elevaron ya hace tiempo un informe a la Junta defendiendo el edificio para uso como Museo, no sólo por su emplazamiento privilegiado para este fin, sino porque además tirarlo supondrá un altísimo coste y habrá que descontaminar el suelo, donde se ha ido filtrando el gasoil, para cualquier otro uso. Sólo queda un edificio de estas características en Santander y otro en Córdoba. Pero al final, lo que se ha previsto es demolerlo y construir sobre los terrenos 360 viviendas, cuando actualmente hay un superávit de viviendas en San Andrés sin vender. Si el único criterio que ha utilizado León Alta Velocidad ha sido obtener rendimiento económico, parece que esta operación no lo va a ser. Y menos para San Andrés que perdemos una oportunidad única.

Desde IU San Andrés lamentamos la visión tan cortoplacista de este equipo municipal, carente de una política cultural que convierta realmente nuestro municipio en una ciudad atractiva no sólo para sus habitantes, sino también para los visitantes que pasen por ella o puedan venir a visitar su riqueza patrimonial y cultural. De esta forma volvemos a perder otra oportunidad de planificar nuestro municipio de cara al futuro, pensando en el patrimonio y la riqueza cultural que podemos heredar a las futuras generaciones de nuestro Ayuntamiento.